Si la corrida hubiese sido tediosa, mala, aburrida o como queráis llamarla, esta crónica se hubiese llamado un misógino en la grada. Esto es así porque un señor que no se encontraba muy lejos de mí, cuando Castaño iba a matar al segundo de la tarde dijo, "como astao, como no le de la oreja, había que ajorcá a las dos tías esas" (refiriendose a presidenta y asesora), acto seguido repuso "es una forma de hablá, eso no se le dise a naide". El hombre se veía que tenía algún pequeño fallo mental (va sin ningún tipo de sorna, y por supuesto ni quiero hacerla). Pues este señor vibraba y se emocionaba con cada torero, como un chiquillo de 3 años oiga!. En esto que el de delante (con el tímpano supongo que sangrando) le pregunta: "¿Le gustan a usted los toros eh?" y este le contesta: "Yo avese me queo sin comé pa podé vení" y señores, que queréis que os diga, no se si fue verdad o mentira (el pobre hombre se ve que muchos medios económicos no tiene), pero me emocionó, mi pequeñoy casi siempre imperturbable corazoncito me dio un pequeño vuelco y me dije: "ahora mismo me cambiaba por este hombre"
Pues bien, vamos al lío:
Difícil por no decir imposible lo tenía Pagés para sustituir a una máxima figura como el Juli para que la corrida no perdiese interés. E increíble ha sido el casi lleno en los tendidos después de la descompensada a priori sustitución de Julián.
El peor lote fue para el murciano, con un primer toro muy mirón (aunque con cierta bondad, miraba, Rafaelillo enseñaba al público que lo miraba,y pasaba) al que le aguantó recordando al gran torero que fue 4 tempordas atrás. Muy firme.
Su segundo fue un toro muy orientado con el que sí pudo sufrir si hubiese sido más inexperto el momento de cero gravity. Volvió a estar firme.
Como dice mi amigo Abel, Javier Castaño es una puesta en escena desde que sale su toro de chiqueros, tanto por él mismo como por su gran cuadrilla, Destacando a Tito Sandoval, y los toreros y arriesgadísimos pares de David Adalid, el primero de ellos espectacular. Al segundo de la tarde toreó muy bien y con gusto, y le pegó una tercera tanda por la derecha con media muleta arrastrando. Pinchó y se quedó sin una muy merecida oreja. En su segundo, toro noblote aunque con menos recorrido la faena no alcanzó el vuelo necesario para hacer vibrar a Sevilla.
Y vamos con el sustituto, aquel que hasta esta tarde no lo conocía más de la mitad de los que pisaba la Maestranza, y despues de la corrida, todos hablan como si lo conociesen de siempre y se jactan de haberlo visto.
Su actitud fue irreprochable toda la tarde, jugando a un todo o nada y toreando de verdad. Si tenéis oportunidad de verlo (espero de verdad que empiecen a sonar los teléfonos) veréis con que suavidad y temple maneja el capote este chico. Le hizo un quite al primer toro de Castaño por chicuelinas muy ajustado y con mucho gusto. Con los palos es en demasía bullidor y tremendista, pero sabe ponerlas, su segundo par al tercero de la tarde fue comparabla al primero de Adalid. Con la muleta estuvo más que bien, pero lo pinchó. Una pena.
Al que cerraba plaza y se le concedió una vuelta al ruedo (inmerecida, el caballo ni lo olió), empezó en una faena bronca, en la que el toro no hacía más que dar gañafones y defenderse. Escribano hizo al toro y le pegó una tanda de naturales que la plaza se cayó, a partir de ahí, a torear bien, rematando con doblones por bajo y estoconazo. Dos orejas.
Al final la plaza contenta, y todo aquel que haya debutadohoy en esto de los toros, no habrá quedado indiferente, a diferencia de las muchas tardes soporíferas con primeras figuras en el ciclo abrileño.
Sergio Gordillo
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