viernes, 30 de agosto de 2013

José Cubero, YIYO

 Hoy es día de triste aniversario, el de la trágica tarde en Colmenar, donde el toro Burlero, se llevó junto con la suya propia, la vida de un emergente torero, que llegaría a figura de época indiscutiblemente según el testimonio de quienes lo vieron, y marca un halo mítico y místico a los que no pudimos conocerlo.

Yiyo con Cigarrón, de Alonso Moreno


YiYo en su última actucación en Las Ventas (con el mismo traje que fue amortajado)
 


En su faena de muleta, Yiyo llevó a cabo una magistral labor, de la que el solvente crítico JA del Moral dijo que fue la más completa de las múltiples que le había visto realizar, y que culminócon una gran estocada de la que moriría el morlaco, no antes de que corneara certeramente al espada en el costado izquierdo, produciéndole una profunda herida que le llegaba al corazón (...) La impresión causada por el trágico fin, sobrepasó, con creces, los límites de la afición taurina, para hacerse unánime en todos los sectores sociales
El joven ídolo había caído para siempre en la arena de un coso pueblerino. (...)
Es necesario subrayar su pundonor torero, que le impedía rehuir las plazas de categoría y responsabilidad, así como el no poner impedimentos frente al ganado de divisas de mayor compromiso(...)
Nunca se hará viejo en nuestro recuerdo, en el que permanecerá para siempre con su cara aniñada de sutil sonrisa triste, como si de un augurio se tratara.

JM de Cossío. Los toros. Bibliografía


Yiyo a derechas con Burlero



No encontraban consuelo posible. Estaban destrozados y lo estábamos todos los demás, por que era demasiado casual que Yiyo, un torero tan prometedor, tan jóven y que además fue quien dio muerte al toro Avispado que mató a Paquirri, hubiera muerto en el ruedo de la plaza a manos de un toro muerto por él mismo, y tras haber realizado la faena más perfecta de su vida

JA del Moral, extracto de la crónica sacado de Aplausos


Este es nuestro humilde homenaje a la memoria de quien sin duda, no dejó indiferente a ningún aficionado y no dejó la duda de el "que hubiera pasado si..", puesto que no sólo se le recuerda como figura, sino como mito.

Sergio Gordillo

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